domingo, 3 de junio de 2007

Palabras (II)

  • "Segundo microrrelato para el concurso al que me invito a participar Blanca... No me gusta mucho como a quedado pero lo escribí en la biblioteca sin pensar y no me ha dado tiempo a corregirlo ya que he llegado a mi casa a la doce menos diez... Soy un desastre, y de examenes mucho más"


Palabra tras palabra me iba desvelando algun detalle de su historia… Lo que empezó con un café a media tarde acabó alargándose hasta altas horas de la madrugada y se convirtió en una conversación sobre la vida en general y su vida en particular.

Parecia mentira que, después de tanto sufrimiento, tantas decepciones y tanto dolor ella siguiese así, luchando por sonreir, y lo que era más increíble, lo consiguiese.

Mi sentimiento de culpa por haberla juzgado solo por la apariencia sin apenas conocerla, pensando que solo era una niña frívola más, sin ningún tipo de fondo no hacía otra cosa que crecer, y con él una sensación de repugnancia hacia mi mismo.

Decidí ese día no volver a prestar atención a la fachada porque es una mala consejera.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy bien descrita la sensación del protagonista... Y me parece una historia muy cercana, muy real. ¿Quién no ha tenido ganas de darse collejas por haber juzgado mal a alguien? Lo has reflejado fenomenal...


Mi consejo: Si taaaan "decepcionado" estás por no haber tenido tiempo... dale un par de vueltas y publícalo en otra entrada. A ver si lo mejoras... No sé yo, ¿eh?

¿Qué si me importa que me escriban comentarios?

Al revés, todo lo contrario, me anima el saber que hay alguien a quien, inexplicablemente, le gusta lo que escribo.