Te quedas sin palabras, todas tus prioridades se desmoronan y todo aquello que tenias claro deja de tener sentido.
No te sientes capaz de buscar un motivo para explicarlo, porque sabes que nunca lo encontraras.
Se te ocurren tantas preguntas que decides dejar de pensar en todo ello e intentas desconectar de todo, pero no es más que eso, un intento en vano de algo que parece imposible…
No dices ni una palabra, solo piensas... No puedes dejar de pensar en tantos recuerdos, tantas ilusiones y tantos sueños frustrados por algo sin sentido.
Y es que el cáncer no tiene mucho sentido, y menos cuando destroza la vida de un niño de ocho años. ¿Por qué? No hay ningún porque. Y tú solo sientes impotencia ante tanta injusticia.
No te sientes capaz de buscar un motivo para explicarlo, porque sabes que nunca lo encontraras.
Se te ocurren tantas preguntas que decides dejar de pensar en todo ello e intentas desconectar de todo, pero no es más que eso, un intento en vano de algo que parece imposible…
No dices ni una palabra, solo piensas... No puedes dejar de pensar en tantos recuerdos, tantas ilusiones y tantos sueños frustrados por algo sin sentido.
Y es que el cáncer no tiene mucho sentido, y menos cuando destroza la vida de un niño de ocho años. ¿Por qué? No hay ningún porque. Y tú solo sientes impotencia ante tanta injusticia.
3 comentarios:
Hermano no podes escribir tan bien, te tengo una envidia sana impresionante...
Ya te he dicho todo lo que pienso (mi cutre-minianálisis), pero quiero dejarte aquí mi opinión: Increíble, increíble, increíble.
Y acabo de ver lo de los comentarios: INEXPLICABLEMENTE? Disculpa, más quisieran muchos de periodismo escribir la mitad de bien que tú.
Ya tienes asiduos al blog, además por lo que veo. Igual de pesada que siempre, te animo a que sigas escribiendo!! Un besote
me alegro que te hayas unido al concurso de microrrelatos de ana!
yo también he escrito y espero que podamos disfrutar durante muchas ediciones de pequeños retazos de literatura
besetee
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